Gloria habla tímidamente sobre su historia de contagio del COVID-19. Pero no solo eso, ella se convirtió en la primer paciente en dar a luz, portando el mal de Wuhan, en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad (IESS) del sur de Quito.

La mujer, de 26 años, forma parte del área de limpieza de un hospital de esa ciudad. Por ello presume que durante sus tareas pudo infectarse.

Los jefes la enviaron para que se hiciera el test. Y el pasado 20 de abril los resultados dieron positivo, por lo que fue trasladada a la casa de salud quiteña.

Washington Herrera, jefe de servicio de ginecología y obstetricia, explicó que por tener síntomas leves fue dada de alta. Pero los controles se realizaron por dos ocasiones más y se determinó que todavía era portadora del virus.

Hasta ese momento, ella estaba en la semana 37 de embarazo de su segundo hijo. Fue el 7 de mayo que vinieron los dolores: el bebé llegaría al mundo pronto.

No hubo complicaciones

Sandra Duque, coordinadora de neonatología del IESS Quito Sur, dijo que la bebé nació con un buen peso. “No hubo ninguna complicación. Aunque tanto la madre como la niña pasaron a una habitación de aislamiento”, confirmó.

Como la recién nacida no tiene el virus, no es necesario su alojamiento en otra área. Para confirmarlo se realizó un hisopado luego de 24 horas del nacimiento, cuyo resultado fue negativo. 

En el caso de Gloria, ella tampoco presenta síntomas, pese a ser portadora. Por ello ambas permanecen juntas. “Se cumple con la lactancia materna normal”, precisó la galena.

Pero se aplica el protocolo de bioseguridad. La mamá tiene que usar permanentemente la mascarilla y lavarse frecuentemente las manos.

91 menores de edad han sido atendidos

El hospital IESS#Sur, hasta la fecha, ha atendido más de 9.000 mil casos de personas infectadas con COVID-19, según el gerente Danilo Calderón.

De esa cantidad, 91 pacientes han sido menores de edad. Cifras entregadas en la casa de salud muestran que solamente 11 pacientes fueron lactantes.

Los demás eran de etapa preescolar, escolar y también adolescentes. Mientras que en el caso de mujeres embarazadas, los médicos atendieron un total de 18, pero a quienes solamente tenían síntomas gripales.